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EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Octava parte)

miércoles, 11 de marzo de 2009

EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Octava parte)

También desde perspectivas sociológicas, algunos autores como José María Tortosa (Tortosa, 1999) realizan agrupaciones similares, considerando las teorías del desarrollo agrupadas en:

  • Teoría de la modernización;
  • Teoría de la dependencia;
  • Teoría de los sistemas-mundo;
  • Perspectiva neoliberal;
  • Desarrollo Humano.

Giovanni Reyes (2001), por su parte, considera, en un esquema similar, la globalización como una de las teorías (con bases teóricas en el movimiento social estructuralista-funcionalista), parecida a la teoría de los sistemas mundiales en la consideración de la escala mundial de análisis.

Por último destacar la interesante lectura del pensamiento sobre desarrollo aportada por Joan Prats (2001), similar a la crítica de Joseph Stiglitz a las concepciones anteriores sobre desarrollo. Arranca de los paradigmas o tradiciones intelectuales en las que se ha sustentado: por un lado el racionalismo constructivista, que ha sustentado prácticamente la totalidad del pensamiento sobre desarrollo (tanto el neoclásico, de la modernización y neoliberal, pero también el neomarxista y de la dependencia) y que dio lugar al diseño del sistema institucional de la cooperación internacional, y por otro lado, el racionalismo evolutivo o crítico, que emerge tras el redescubrimiento del valor de las instituciones para el desarrollo (abarcaría, por lo tanto, sólo enfoques alternativos del desarrollo como el desarrollo endógeno, autónomo, ecodesarrollo, los enfoques neoinstitucionalistas del capital social y, en cierta medida, el desarrollo humano).

EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Séptima parte)

martes, 10 de marzo de 2009

EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Séptima parte)

John McKay (1991) clasifica sin embargo los diferentes modelos de desarrollo que han sido dominantes en el pensamiento occidental en diferentes momentos en diez:

  • Teoría de la modernización;
  • Teoría de la dependencia;
  • Enfoque de las necesidades básicas;
  • Ajuste estructural;
  • Modelos de articulación;
  • Internacionalización del capital;
  • Antimodernización;
  • Desarrollo de las raíces populares básicas;
  • Ajuste con rostro humano; y
  • Desarrollo sostenible.

EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Sexta parte)

martes, 17 de febrero de 2009

EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Sexta parte)

Los mismos criterios de clasificación son utilizados por Bustelo, simplificando en

“teorías ortodoxas” y “teorías heterodoxas”:

LAS TEORÍAS ORTODOXAS

  • Los pioneros del desarrollo (1945-57)
  • La involución conservadora (1957-69)
  • El enfoque de las necesidades básicas (1969-78)
  • La contrarrevolución neoclásica (1978-90)
  • El enfoque favorable al mercado (1990-1998)
  • ¿Hacia un Post-Consenso de Washington? (desde 1998)

LAS TEORÍAS HETERODOXAS

  • El estructuralismo de la CEPAL (1945-57)
  • El enfoque de la dependencia (1957-69)
  • La reevaluación crítica (1969-1976)
  • El enfoque de la regulación (de 1976 en adelante)
  • La macro estructuralista y el neoestructuralismo latinoamericano (desde 1983)
  • La economía radical del desarrollo en los años noventa

EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Quinta parte)

lunes, 16 de febrero de 2009

EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Quinta parte)

Teoría neomarxista del desarrollo.

Arranca con la actualización de la teoría del imperialismo en los 50 y llega hasta los 80. El subdesarrollo es considerado como un elemento central en el propio funcionamiento del sistema capitalista.

Teoría neoliberal.

Se inicia como tal en la crisis de los 70, se desarrolla e implementa en los 80 y en los 90 empieza a ser cuestionada. El mercado es el mejor agente de desarrollo, por lo que la intervención y el propio Estado deben ser reducidas al mínimo indispensable, siendo la liberalización interna y externa y la estabilidad macroeconómica las estrategias principales.

Teorías alternativas.

Sin constituir, dada su heterogeneidad, un cuerpo teórico común, coinciden en la erradicación de la pobreza como objetivo del desarrollo y su multidimensionalidad como concepto.

EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Cuarta parte)

domingo, 15 de febrero de 2009

EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Cuarta parte)

En el debate sobre la propia identidad y pertinencia de la subdisciplina, la concepción más aceptada de la Economía del Desarrollo es la de Albert Hirschmann, basada en el rechazo de la aplicación de un mismo análisis económico a realidades distintas (rechazo de la pretensión monoeconómica) y en la afirmación de que las relaciones entre países desarrollados y países subdesarrollados generan beneficios mutuos (afirmación de la pretensión del beneficio mutuo).

En cuanto al análisis y clasificación de las diferentes aportaciones, corrientes de pensamiento y teorías que se han planteado en el campo de la Economía del Desarrollo desde su nacimiento, “cualquier tipología o resumen de las diversas teorías globales del desarrollo y del subdesarrollo adolecerá de excesivo simplismo, puesto que las fronteras entre las diversas concepciones y diagnósticos son en ocasiones verdaderamente confusas”.

De entre los distintos criterios utilizados por diferentes autores (normalmente un criterio cronológico o un criterio según enfoques ideológico-metodológicos) se seguirá la clasificación realizada por Hidalgo: una primera agrupación en el nivel de “Teorías” según el enfoque ideológico-metodológico y la utilización de un criterio cronológico para la subclasificación dentro de cada teoría.

Según estos criterios se plantean cinco grandes teorías del desarrollo:

Teoría de la modernización.

Ortodoxia de la Economía del Desarrollo durante los años 50 y 60, plantea la imitación del camino seguido por las economías industrializadas en su desarrollo como estrategia.

Teoría estructuralista.

Surge a raíz de los trabajos de Prebisch de principios de los 50 y conforma la heterodoxia, afirmando que sólo puede entenderse el problema del subdesarrollo desde un análisis histórico – estructural de las economías en desarrollo.

EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Tercera parte)

sábado, 14 de febrero de 2009

EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Tercera parte)

La conceptualización del desarrollo presenta, pues, no pocos problemas. Uno de ellos, si no el principal, es probablemente el que se deriva del estrecho marco en el que se ha teorizado sobre el mismo, reducido casi de manera exclusiva al campo de la ciencia económica: “la ausencia de referentes obligados en otros ámbitos de las ciencias o su menor presencia en ellas ha contribuido sin duda negativamente a una noción de desarrollo demasiado dependiente de lo considerado como estrictamente económico.”. Un hecho que sin duda tiene su reflejo en la asimilación del concepto de desarrollo con el desarrollo económico durante décadas y en las dificultades de ampliar la noción de desarrollo con el aporte de otras disciplinas.

Estando reconocida por muchos autores significativos la necesidad (y urgencia) de un estudio interdisciplinario del, la realidad es que el estudio sobre el desarrollo ha estado prácticamente circunscrito a la ciencia económica hasta muy recientemente.

Por ello se abordará la descripción del pensamiento sobre desarrollo desde la perspectiva del pensamiento económico sobre desarrollo, introduciendo aportes de otras disciplinas transversalmente.

En su descripción previa Hidalgo distingue, en la estructura de las ciencias económicas y el estudio del desarrollo, dos conceptos:

El PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO: “conjunto de conocimientos científicos en torno al concepto de desarrollo económico”, desde el pensamiento mercantilista hasta hoy.

La ECONOMÍA DEL DESARROLLO: “subdisciplina científica de la teoría económica que se encarga del estudio de las economías de los países menos desarrollados” (el desarrollo económico en estos países). Esta surge como subdisciplina a partir de la 2ª Guerra Mundial con los trabajos de los pioneros del desarrollo (Rosentein-Rodan; Nurkse; Singer; Lewis; Gerschenkron; Hirshman, Perroux; Rostow; Myint y Prebisch, y está conformada por la Teoría económica del desarrollo (Development Economics) y los estudios de carácter empírico (que no forman parte en sí mismos, como estudios empíricos, del pensamiento económico sobre desarrollo). Considerada como Teoría económica del desarrollo, forma parte del pensamiento económico sobre desarrollo.

EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Segunda parte)

viernes, 13 de febrero de 2009

EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Segunda parte)

Todaro propone en 1983 la redefinición del desarrollo más allá de la dimensión económica del mismo al plantear que “…Se debe concebir el desarrollo como un proceso multidimensional compuesto por grandes transformaciones de las estructuras sociales, de las actitudes de la gente y de las instituciones nacionales, así como por la aceleración del crecimiento económico, la reducción de la desigualdad y la erradicación de la pobreza absoluta”.

En la década de los noventa se consolida progresivamente esta noción multidimensional del concepto de desarrollo. Adicionalmente, el concepto de desarrollo sostenible introduce la dimensión medioambiental al concebirlo como “aquel que satisface las necesidades del presente sin limitar el potencial para satisfacer las necesidades de las generaciones futuras” (Comisión Mundial del Medio Ambiente).

Así, el propio Banco Mundial define el desarrollo económico como “el mejoramiento sostenible del nivel de vida, el cual comprende consumo material, educación, salud y protección del medio ambiente. En un sentido más amplio, la definición comprende también otros transcendentes aspectos conexos, principalmente la mayor igualdad de oportunidades, la libertad política y las libertades civiles. Por consiguiente, el objetivo global del desarrollo es el de dotar de mayores derechos económicos, políticos y civiles a todos los seres humanos, sin distinción de sexo, grupo étnico, religión, raza, región o país”

La introducción del concepto de desarrollo humano por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, que concibe el mismo como “el proceso de ampliar la gama de opciones de las personas, brindándoles mayores oportunidades de educación, atención médica, ingreso y empleo, y abarcando el espectro total de opciones humanas, desde un entorno físico en buenas condiciones hasta libertades económicas y políticas”. (PNUD, 1992: p. 18), es sin duda el concepto actualmente más aceptado, vinculado al de desarrollo sostenible.

EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Primera parte)

jueves, 12 de febrero de 2009

EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Primera parte)

La definición del concepto de desarrollo no es, ni mucho menos, una tarea sencilla. El tratamiento de este concepto ha evolucionado desde sus inicios por la preocupación del problema de la desigualdad entre los diferentes países después de la Segunda Guerra Mundial hasta nuestros días, no habiendo sido precisamente objeto de consenso su definición. Más bien puede hablarse de coincidencia acerca de lo que no es el desarrollo, o acerca de lo que significa la falta de desarrollo.

Siguiendo la descripción de Todaro (1988[1983]: pp. 117-120), tradicionalmente se entendía como desarrollo “la capacidad de una economía nacional, cuyas condiciones iniciales se han mantenido más o menos estáticas durante mucho tiempo, para generar y mantener un incremento anual de producto nacional bruto del 5 al 7% o mayor”.

Durante la década de los sesenta y setenta se consideró que el desarrollo “es el fenómeno económico por el cual el crecimiento del PNB o del PNB per cápita repercutiría poco a poco en toda la población en forma de empleo y otras oportunidades económicas o crearía las condiciones necesarias para una distribución más amplia de beneficios económicos y sociales del crecimiento.

Fruto de los fracasos de la experiencia de los años cincuenta y sesenta respecto a los resultados del desarrollo en términos del nivel de vida de la población concebido como anteriormente se expresaba, en los años setenta “el desarrollo económico fue redefinido en términos de reducción de la pobreza, la desigualdad y el desempleo, dentro de un contexto de crecimiento económico”. Con la crisis de los setenta y ochenta la situación se agravó sustancialmente con la recesión económica de muchos de los países subdesarrollados y el recorte en los programas sociales propios, ya de por sí limitados, resurgiendo un planteamiento neoclásico centrado en los aspectos macroeconómicos y en el papel preponderante del mercado.

LA TEORÍA DEL DESARROLLO ECONÓMICO Y LA HISTORIA DEL PENSAMIENTO ECONÓMICO

miércoles, 4 de febrero de 2009

LA TEORÍA DEL DESARROLLO ECONÓMICO Y LA HISTORIA DEL PENSAMIENTO ECONÓMICO

Los autores que coinciden el fenómeno del desarrollo como un proceso de crecimiento, suelen definir el nivel de desarrollo en términos de ingreso por habitante, y el proceso de desarrollo en términos de tasa de crecimiento. El ingreso por habitante es para esta escuela el indicador, o medida, más adecuado para definir el nivel y ritmo de desarrollo. Este mismo criterio lleva también a establecer nómina de países ordenados según su nivel de ingreso medio por habitante es para esta escuela el indicador, o medida, mas adecuado para definir el nivel y ritmo de desarrollo. Este mismo criterio lleva también a establecer nóminas de países ordenados según su nivel de ingreso medio por habitante de donde se deduce en seguida que aquellos que están por encima de cierto limite arbitrariamente escogido serán considerados países desarrollados, y poco desarrollados los que están por debajo del mismo.

Numerosos son los autores que adoptan como punto de partida las teorías del crecimiento para analizar aspectos del desarrollo y casi todos ellos centran su atención sobre cuestiones relacionadas con la inversión; temas tales como determinar la tasa de inversión, el financiamiento externo, los criterios de prioridad en la asignación de recursos, la movilización de los ahorros internos, etc., constituyen la preocupación fundamental de quienes piensan en el desarrollo como si fuera un problema de crecimiento.