La teoría neoliberal del desarrollo

sábado, 11 de julio de 2009

La teoría neoliberal del desarrollo

Paralelamente al desarrollo de las teorías de la modernización, estructuralistas y neomarxistas, comienza a fraguarse una corriente crítica a la teoría de la modernización proveniente de posiciones conservadoras. Pero es desde mediados de los setenta y, sobre todo, durante los ochenta y noventa, cuando la Economía del Desarrollo ha estado claramente dominada por el enfoque neoclásico desarrollado por los pensadores neoliberales.

Los autores neoliberales, provenientes del campo general de la teoría económica neoclásica, retomaron un planteamiento monoeconómico al desarrollar sus estudios sobre desarrollo partiendo de una teoría general que aplican tanto a los países subdesarrollados como a los países desarrollados.

La recuperación del pensamiento original del liberalismo económico conforma, como primer elemento de la teoría neoliberal, la defensa del mercado como el mecanismo más eficaz en la asignación óptima de recursos, la crítica de la intervención pública en la economía y las ventajas del libre comercio internacional criticando duramente el modelo de industrialización por sustitución de importaciones (ISI).

De entre los descritos por Hunt, pueden destacarse los siguientes postulados de la teoría neoliberal del desarrollo:

  • La creencia en la desigualdad económica como incentivo humano.
  • Las operaciones del mercado sin intervención maximizan la eficiencia y el bienestar.
  • La convicción del principio de beneficio mutuo del comercio internacional.
  • La defensa de la mínima intervención del Estado y los gobiernos.
  • La importancia central de los precios como referente de información fundamental para la asignación de recursos.
El disentimiento de los autores conservadores, las propuestas de liberalización interna y externa y, sobre todo, los planteamientos reformistas basados en la estabilización y el ajuste configuran el núcleo del nuevo modelo neoliberal.

La teoría neomarxista y la tesis de la desconexión

viernes, 10 de julio de 2009

La teoría neomarxista y la tesis de la desconexión

La tesis de la desconexión de Samir Amin, que constituye la última aportación sustancial de la teoría neomarxista anterior a la caída del muro de Berlín, aporta un nivel de concreción a la abstracta solución al problema del subdesarrollo hasta ese momento aportada por la teoría neo-marxista (el “tránsito hacia el socialismo”).

Por desconexión debe entenderse, según Amin, no un repliegue autárquico o exclusión de los países subdesarrollados, sino la subordinación de las relaciones exteriores al desarrollo interno autocentrado de cada país de la periferia, subordinando por lo tanto los criterios de racionalidad económica resultantes de la dominación de las leyes del capitalismo a escala mundial a las necesidades nacionales y populares de la periferia.

La desconexión es necesaria para el cambio del sistema hacia el socialismo, puesto que la periferia necesita desconectarse como consecuencia del desarrollo desigual del capitalismo. Sería un método para la construcción de un sistema mundial diferente basado en la solidaridad y el internacionalismo.

De esta forma se permitiría romper la tendencia del sistema capitalista mundial a impedir el desarrollo de las periferias por los centros, llegando a ser viable la configuración de un sistema mundial policéntrico.

En la desconexión, y ésta es una de las principales críticas a la tesis, toma un papel fundamental la opción revolucionaria popular como inicio del proceso y primer paso hacia el socialismo, con la asunción implícita de procesos de levantamiento popular más o menos violentos como parte importante del tránsito.

La teoría neomarxista y el sistema capitalista mundial

jueves, 9 de julio de 2009

La teoría neomarxista y el sistema capitalista mundial

La teoría neomarxista del desarrollo evoluciona en los años setenta con la ampliación del marco formal de la misma a través del enfoque del sistema capitalista mundial. Muchos de los autores neo-marxistas citados anteriormente participan de este nuevo enfoque, aunque los autores más destacados fueron Immanuel Wallerstein y Christian Palloix.

Wallerstein, entre cuya obra destaca El moderno sistema capitalista mundial, parte en su marco de análisis de la consideración del comportamiento de la economía mundial como un sistema mundial. El moderno sistema mundial estaría caracterizado como un sistema capitalista distinguiendo entre capitalismo periférico (subdesarrollo) y capitalismo central (desarrollo).

Según Reyes una las principales diferencias entre la aproximación de los enfoques de la dependencia y de los sistemas mundiales reside en la unidad de análisis (el estado-nación en la primera y los sistemas y subsistemas mundiales en la segunda).

La teoría neomarxista de la dependencia (Segunda parte)

viernes, 1 de mayo de 2009

La teoría neomarxista de la dependencia (Segunda parte)

Para Dos Santos, por su parte, la causa del subdesarrollo es la dependencia, y por tanto sólo es posible el desarrollo mediante un cambio profundo tanto en las relaciones internas de los países dependientes como en las externas que mantienen con los centrales. Caracteriza la dependencia como factor interno históricamente determinado a través de sus diferentes formas históricas (la dependencia colonial, la financiero industrial y la tecnológico industrial actualmente vigente, marcada por el protagonismo de las empresas multinacionales que obliga a mantener un sector exportador para el pago de insumos industriales, la repatriación de beneficios y necesidad de financiación externa del desarrollo, el monopolio intelectual a través de las patentes y la subordinación de los gobiernos de la periferia y su estructura económica a este hecho).

Samir Amin, por su parte, interpreta la transición hacia el capitalismo en el centro como un proceso autocentrado (el excedente queda en la propia sociedad del centro), diferente del de la periferia (no autocentrado). En el proceso histórico de conformación del sistema capitalista, y con la búsqueda del beneficio como motor, se destruye el artesanado local y se produce la crisis de la agricultura tradicional en la periferia, que bloquean el desarrollo de las fuerzas productivas.

La teoría neomarxista de la dependencia (Primera parte)

jueves, 30 de abril de 2009

La teoría neomarxista de la dependencia (Primera parte)

La teoría neomarxista de la dependencia debe gran parte de su desarrollo al estructuralismo latinoamericano como se describió anteriormente, y parte en lo inmediato de los planteamientos de Baran de la interpretación del subdesarrollo como un producto histórico del desarrollo y de la imposibilidad del capitalismo de ser la respuesta al subdesarrollo, dado que no existe esperanza de que surja una clase capitalista emprendedora autóctona en la periferia, por el desarrollo histórico de sus economías.

Entre los principales autores de la escuela neomarxista de la dependencia figura Frank, quien en su ensayo El desarrollo del subdesarrollo, amplía el modelo centro periferia de Prebisch (relaciones que denomina metrópoli-satélite) describiendo cómo este sistema de relaciones se reproduce consecutivamente a diferentes escalas: entre países, internamente a los países subdesarrollados, y dentro de éstos. Así, excepto para las metrópolis principales, los satélites se convierten a su vez en metrópoli con sus propios satélites internos en el país. Y éstos, a su vez, en metrópoli para otros satélites internos, configurando una concatenación de constelaciones metrópoli-satélite caracterizada por la extracción del excedente por cada metrópoli a sus satélites, que es a su vez extraído por la metrópoli superior.

Frank plantea la hipótesis de que la tendencia del sistema es el desarrollo de la metrópoli y el subdesarrollo del satélite, por lo que el desarrollo de las metrópolis-satélites nacionales, regionales o locales dentro de los países subdesarrollados es en realidad un desarrollo subdesarrollado. De ahí el planteamiento de una segunda hipótesis que marca la proporcionalidad directa existente entre el subdesarrollo y la intensidad histórica de la conexión con el sistema capitalista industrial.

La moderna teoría del imperialismo y el intercambio desigual

miércoles, 29 de abril de 2009

La moderna teoría del imperialismo y el intercambio desigual

El arranque de la teoría neomarxista puede situarse en la obra de Baran y Sweezy. Basando sus análisis en el concepto de excedente económico (beneficio agregado de la producción nacional), estos autores caracterizan como ley de comportamiento la tendencia al aumento del excedente debido al carácter monopólico del sistema capitalista con el papel protagónico de las grandes corporaciones mundiales. Dadas las dificultades para absorber este aumento constante del excedente, y su tendencia natural al estancamiento, la única salida para evitarlo es precisamente el imperialismo, señalando la relación del gasto militar con la defensa de los intereses de las grandes corporaciones.

En este contexto toman protagonismo las multinacionales como actores que deciden su estrategia desde las casas matriz en función del interés global de la corporación, independientemente del perjuicio de estas decisiones en los países del mundo en que están ubicadas. Este hecho, unido a la repatriación de beneficios, configura a la inversión extranjera en los países subdesarrollados como un mecanismo de transferencia de riqueza de éstos a los países desarrollados y, por tanto, en mecanismo de subdesarrollo más que de desarrollo de los primeros.

En el contexto del posterior desarrollo en Francia de la teoría, Emmanuel y Braun, autor argentino que complementa los postulados del primero, analizan el fenómeno del intercambio desigual a través de los salarios desiguales en los países subdesarrollados y los desarrollados. Emmanuel explica el intercambio desigual a través de la situación de subsistencia en la que se encuentran los trabajadores de la periferia, que es el hecho que induce los bajos salarios y nola baja productividad, frente a los salarios altos de los países centrales.

Por su parte, Braun explica el mismo aduciendo que son los países imperialistas los que tensionan a la baja los precios de las exportaciones y los salarios de la periferia a través de sus políticas comerciales y proteccionistas.

La teoría neomarxista del desarrollo (Segunda parte)

martes, 28 de abril de 2009

La teoría neomarxista del desarrollo (Segunda parte)

Surgida inicialmente en los Estados Unidos con las aportaciones de Paul Baran y Paul Sweezy (estudios centrados en la tendencia al aumento del excedente y el papel del proteccionismo) durante los años cincuenta y sesenta, continúa su desarrollo en Francia hacia finales de los años sesenta con los trabajos de autores como Arghiri Emmanuel o Samir Amin (sobre el intercambio desigual y el desarrollo desigual). En los setenta toma fuerza en América Latina con los trabajos fundamentalmente de Oscar Braun, Theotonio Dos Santos y André Gunder Frank , constituyendo los desarrollos centrales de la corriente neomarxista de la teoría de la dependencia.

En los años ochenta la teoría neomarxista del desarrollo continúa ampliándose, sobre todo en Europa, a través de Immanuel Wallerstein y Christian Palloix (con la descripción del funcionamiento del sistema capitalista mundial) concluyendo hasta la fecha su desarrollo con la conocida tesis de la desconexión de Samir Amin en los últimos ochenta, previo al declive del pensamiento neomarxista después de la caída del muro de Berlín.

La teoría neomarxista del desarrollo (Primera parte)

lunes, 27 de abril de 2009

La teoría neomarxista del desarrollo (Primera parte)

La teoría neomarxista del desarrollo nace después de la 2ª Guerra Mundial como alternativa a las teorías de la modernización.

Hunt resume los principales postulados de la teoría neomarxista del subdesarrollo como sigue:

  • El subdesarrollo es un proceso de continua extracción por los centros del excedente generado en la periferia.
  • Los países subdesarrollados se caracterizan por bajo ingreso per cápita y baja acumulación de capital.
  • El desarrollo económico se caracteriza por la reinversión nacional del excedente.
  • El desarrollo futuro de cualquier país está determinado por su posición en la economía internacional.
  • El elemento central del método de análisis es la adopción de una perspectiva histórica y la atención hacia el control del excedente de los países subdesarrollados por las diferentes clases sociales.
  • La inserción de los países subdesarrollados en el sistema de relaciones de intercambio desigual está provocada por la introducción de éstos en el sistema de relaciones por los países capitalistas industrializados.
  • Estas relaciones de intercambio desigual persisten hoy en día.
  • El intercambio desigual ha destruido la producción artesanal precapitalista en los países subdesarrollados y reducido el incentivo al desarrollo industrial autóctono.
  • Las exportaciones manufactureras de los centros reducen aun más el incentivo a la industrialización de la periferia.
  • El precario desarrollo industrial que se ha producido en la periferia ha estado controlado por los monopolios industriales que han extraído el excedente hacia los centros.
  • Las clases dominantes de la periferia no promueven el desarrollo productivo en la misma pues no tienen interés en ello, dados sus elevados ingresos.
  • Las economías de los países subdesarrollados no pueden seguir el camino por etapas previsto por la modernización pues las condiciones internacionales han cambiado irreversiblemente.
  • El desarrollo económico sólo puede darse con un cambio político radical.

El neoestructuralismo latinoamericano (Tercera parte)

lunes, 20 de abril de 2009

El neoestructuralismo latinoamericano (Tercera parte)

La CEPAL ha continuado desarrollando las ideas que se apuntaba en el enfoque de la Transformación productiva con equidad a lo largo de los años noventa con desarrollos específicos.

  • En primer lugar, el desarrollo sostenible (CEPAL, 1991), planteando estrategias de educación ambiental, internalización de costes ambientales, evaluaciones sistemáticas del impacto ambiental, políticas activas de desarrollo sostenible como el reciclaje y las energías renovables, etc.
  • En segundo lugar la educación como eje de transformación (CEPAL, 1992) donde se pone de manifiesto la necesidad de la educación en la ciudadanía y en los valores, además de en la competitividad como pilar básico de la transformación con equidad.
  • En tercer lugar el enfoque integrado (CEPAL, 1992), planteando políticas económicas de crecimiento acompañadas de políticas sociales no asistenciales orientada a la inversión en capital humano y social.
  • En cuarto lugar los aspectos referidos a la población (CEPAL, 1993).
  • Por último, el regionalismo abierto (CEPAL, 1994), donde enfatiza la potencialidad de la integración regional en América Latina y el Caribe como medio de mejorar sustancialmente la inserción del continente en el contexto internacional.

El neoestructuralismo latinoamericano (Segunda parte)

domingo, 19 de abril de 2009

El neoestructuralismo latinoamericano (Segunda parte)

Las propuestas de la CEPAL se ven reforzadas y complementadas con el trabajo paralelo de Sunkel (1991), donde propone un modelo de desarrollo desde dentro. Plantea, desde este punto de vista, un proceso de industrialización en torno a un proceso endógeno de acumulación y de generación de progreso técnico donde el papel del Estado es decisivo más allá de sus funciones clásicas. Orienta el diagnóstico de los problemas hacia la oferta más que hacia la demanda, por lo que el papel del Estado debe ser reorientar y reforzar ésta, manteniendo los equilibrios macroeconómicos básicos, pero a un ritmo más moderado que el planteado desde el neoliberalismo, y acompañado de programas de alivio de la pobreza.

El papel del Estado es también activo en la orientación y puesta en marcha de políticas adecuadas adaptadas a la realidad de cada país: de transformación y modernización productiva (fomento de las exportaciones mediante la intervención selectiva); políticas agrícolas (precios de garantía, estímulo de la demanda interna, innovación tecnológica, servicios postcosecha, mercados de futuros y seguro agrario, etc.); políticas medioambientales (internalización de costes y políticas activas de valoración ambiental); políticas de tecnología e innovación (sistema de I+D y calidad en los productos) y políticas de fomento de la inversión.

El neoestructuralismo latinoamericano (Primera parte)

sábado, 18 de abril de 2009

El neoestructuralismo latinoamericano (Primera parte)

Recogiendo el testigo de las aportaciones anteriores, centradas en la interdependencia como oportunidad de desarrollo, se desarrolla en la última década (años noventa) una corriente de pensamiento en la CEPAL encabezada por Osvaldo Sunkel, que se resume en el documento publicado en 1990 Transformación productiva con equidad (CEPAL, 1990). Parte de un diagnóstico diferente al del Consenso de Washington, y en cierta medida supera al mismo, por cuanto asume gran parte de sus recomendaciones pero las supera.

A partir de los estudios de Fernando Fajnzybler (1990), en los que pone de manifiesto la no existencia de casos entre los países latinoamericanos de correspondencia entre crecimiento económico y equidad (lo que denomina el casillero vacío del desarrollo latinoamericano en referencia a la representación gráfica de los resultados del estudio), emerge el factor de la equidad como clave del desarrollo: la equidad favorece el crecimiento y refuerza la competitividad auténtica (no basada en la sobreexplotación de los recursos naturales o en bajos salarios).

La nueva concepción del desarrollo reflejada en la Transformación productiva con equidad gira en torno a crecer, mejorar la distribución del ingreso, consolidar la democratización, adquirir mayor autonomía, detener el deterioro ambiental y mejorar la calidad de vida de toda la población.

En cuanto a la transformación productiva, se pone énfasis en la competitividad vía progreso técnico y se introduce la necesidad de una aproximación integral al problema productivo (social, institucional, político, etc.); se incorpora asimismo la dimensión territorial y medioambiental. No es suficiente sólo con crear contextos macroeconómicos estables; son necesarios cambios institucionales y generar políticas sectoriales concertadas, acompañando de políticas redistributivas no asistenciales basadas en la formación de capital humano y la provisión de servicios.

Estructuralismo - La interdependencia

viernes, 17 de abril de 2009

Estructuralismo - La interdependencia

En los ochenta se produce un redireccionamiento del pensamiento estructuralista tendente a moderar el discurso aprovechando y defendiendo las posibilidades que ofrece la interdependencia (convergencia de intereses entre centro y periferia que supera la dependencia) y la construcción del Nuevo Orden Internacional, proceso que culmina con la reformulación de esta teoría en el neoestructuralismo de la CEPAL, con el enfoque de la transformación productiva con equidad a principios de los noventa.

Tratando de alejarse de planteamientos pesimistas propios de la dependencia, pero manteniendo en esencia los postulados de la misma, autores como Ricardo Ffrench Davis y Raúl Prebisch destacaron la importancia de avanzar significativamente en la protección del medio ambiente, el control de los recursos naturales, la regulación internacional de la empresas transnacionales, el acceso a los avances científicos, y la participación en el proceso internacional de decisiones para la solución de los problemas globales mundiales. Son éstas condiciones indispensables para que las relaciones de dependencia se transformen en relaciones de interdependencia y hagan posible un intercambio más equitativo. Para Prebisch, el interés mutuo por la convergencia no es sólo económico sino político, pues las situaciones prolongadas de subdesarrollo son un germen de inestabilidad que puede perjudicar los intereses del centro.

La teoría estructuralista de la dependencia (Segunda parte)

jueves, 16 de abril de 2009

La teoría estructuralista de la dependencia (Segunda parte)

Osvaldo Sunkel y Pedro Paz (1973) explican la dependencia como el resultado de un proceso histórico donde el desarrollo y el subdesarrollo son fenómenos simultáneos e interdependientes, en el que “el desarrollo y el subdesarrollo son las dos caras de una misma moneda”, entendiendo el sistema capitalista como un todo. Explican el fracaso de la estrategia ISI debido a la desnacionalización de la importante industria nacional generada en el proceso por su paso a manos de empresas transnacionales que repatrían los beneficios generados y debilitan a la clase empresarial nacional, que resulta en un acrecentamiento de la dependencia provocado por la propia estrategia implementada.

Destacan asimismo la vinculación de los procesos locales de desarrollo con el desarrollo del sistema capitalista mundial, de manera que se favorece a los grupos locales que se vinculan con las actividades extranjeras.

Celso Furtado, Prebisch y Sunkel ponen a su vez el acento en la dependencia cultural (generada por el efecto demostración, que provoca un mal empleo de los recursos orientando los ingresos al consumo en vez de a la inversión reproductiva de capital), en la dependencia tecnológica (incapacidad de los países de capitalismo dependiente para generar innovaciones) y en la dependencia intelectual (la subordinación incondicional a teorías elaboradas en los centros no necesariamente aplicables a sus realidades). En este sentido sostienen que gran parte de los problemas del subdesarrollo son consecuencia de consejos inapropiados y erróneos de los expertos internacionales desconocedores de la realidad de la periferia.

LA TEORÍA ESTRUCTURALISTA DE LA DEPENDENCIA (Primera parte)

jueves, 2 de abril de 2009

LA TEORÍA ESTRUCTURALISTA DE LA DEPENDENCIA (Primera parte)

A mediados de los sesenta surge la teoría de la dependencia, que supone una radicalización del pensamiento estructuralista cepalino que dura hasta mediados de los ochenta y que toma dos direcciones diferenciadas: por un lado la teoría de la dependencia estructuralista y por otro lado la teoría de la dependencia neomarxista.

¿Qué es la dependencia?

Entendiendo por dependencia “una situación en que la economía de ciertos países está condicionada por el desarrollo y expansión de otra economía a la que está sometida”, son diversos los autores que desarrollan y complementan la teoría de la dependencia estructuralista. No obstante, a pesar de la opuesta interpretación de las causas del subdesarrollo, las principales críticas a esta teoría versan precisamente en la carencia de una definición alternativa a la de la modernización de la propia concepción del desarrollo ni del camino para alcanzarlo, que da la sensación de no diferenciarse esencialmente del propuesto por ésta.

Aníbal Pinto y Pedro Vuskovic ponen el énfasis en el estilo perverso de desarrollo basado en polos de modernidad y marginación social.

Fernando Henrique Cardoso y Enzo Faletto aceptan la posibilidad de un desarrollo de la periferia con la característica de ser un desarrollo dependiente asociado asimétricamente al del centro.

ESTRUCTURALISMO - EL DUALISMO DE SINGER Y TODARO (Segunda parte)

miércoles, 1 de abril de 2009

ESTRUCTURALISMO - EL DUALISMO DE SINGER Y TODARO (Segunda parte)

Estos factores derivados del entorno internacional constituyen, por la validez actual de muchos de los planteamientos, verdaderas macrocondiciones del subdesarrollo en el nivel internacional.

Por otro lado es especialmente interesante la interpretación del papel de la ciencia y la tecnología que aporta Todaro, al fundamentar el dualismo en las mismas. A partir del dualismo internacional en ciencia y tecnología Todaro propone explicaciones de las razones por las cuales los sectores rurales o que utilizan tecnologías autóctonas no progresan tecnológicamente con base endógena, al quedar excluidos del proceso de generación tecnológica dominado por los centros (internacionales e internos). Puesto que la tecnología avanzada, si se incorpora en un país subdesarrollado, no responde a las necesidades del país, no será más que un enclave aislado mientras el resto del territorio queda igualmente subdesarrollado. Destaca en este sentido el efecto perverso de la inversión extranjera de alta tecnología a través de enclaves aislados.

En cuanto al análisis del dualismo interno, interpreta que no es un fenómeno natural sino inducido en virtud de un concepto de modernidad basado en la gran escala que no se corresponde con las necesidades de los países pobres. Esta discriminación inducida está provocada, entre otras cosas, por la formación que reciben los decisores según los patrones de los países ricos (efecto demostración). Esto lleva a intentar aplicar a los países pobres conceptos occidentales para la comprensión y solución de sus problemas.

ESTRUCTURALISMO - EL DUALISMO DE SINGER Y TODARO (Primera parte)

martes, 31 de marzo de 2009

ESTRUCTURALISMO - EL DUALISMO DE SINGER Y TODARO (Primera parte)

Completamente diferentes del también llamado dualismo de Lewis, Hans Singer y Michael Todaro plantean la existencia del dualismo entendido como la existencia y persistencia de una desigualdad creciente a distintos niveles entre países y personas ricas y pobres.

El dualismo a nivel internacional se refleja en la desigualdad creciente entre países, con grandes diferencias de nivel de vida e ingreso per cápita y que tiende a aumentar. Según Todaro los factores internacionales que provocan este hecho son:

  • El control y manipulación de los mercados mundiales por parte de los países ricos.
  • La dominación de las economías subdesarrolladas a través de las empresas transnacionales.
  • El acceso privilegiado a materias primas escasas por los países ricos.
  • La exportación de ciencia y tecnología inadecuada para el Tercer Mundo.
  • La capacidad de introducir la producción en los mercados de los países pobres aprovechando las barreras arancelarias que protegen los intereses de las empresas transnacionales.
  • La transferencia de sistemas educativos inapropiados para las necesidades de los países subdesarrollados.
  • La capacidad de los países ricos de alterar los planes de industrialización de los países subdesarrollados introduciendo en el mercado productos más baratos.
  • La utilización de teorías económicas y políticas de comercio internacional perjudiciales para el Tercer Mundo.
  • La existencia de ayuda al desarrollo condicionada y perjudicial.
  • La transferencia de modelos de capacitación inadecuados.
  • La fuga de cerebros hacia los países ricos.
  • El efecto demostración de los hábitos de consumo suntuarios sobre las capas ricas de los países subdesarrollados.

ESTRUCTURALISMO - LOS OBSTÁCULOS AL DESARROLLO

lunes, 30 de marzo de 2009

ESTRUCTURALISMO - LOS OBSTÁCULOS AL DESARROLLO

La estrategia ISI, si bien tuvo un cierto éxito en su etapa primaria (sustitución de importaciones de bienes de consumo), no tuvo éxito en general al fracasar su etapa secundaria (sustitución de bienes intermedios y de capital).

Constatado el fracaso en la aplicación de las teorías anteriores en América Latina, reconocidas por Prebisch y la propia CEPAL, se destaca la insuficiente atención prestada a las causas internas del subdesarrollo. Se introduce de esta manera la noción de los obstáculos al desarrollo para explicar tal fracaso.

Se identificaron tres obstáculos económicos al desarrollo y un obstáculo social: el fuerte crecimiento de la población (obstáculo del trabajo), que provoca la creación de grandes masas urbanas marginadas provenientes del mundo rural que no es posible absorber por el sector industrial; la insuficiente acumulación de capital (obstáculo del capital), incapaz de generar un crecimiento económico superior al de la población y debido a los bajos ingresos y al consumo suntuario de los sectores de renta alta por imitación de las formas de consumo occidentales; el régimen de tenencia de la tierra y la baja productividad agrícola (obstáculo de la tierra); y la propia estructura social (la ineficiencia de un Estado débil, el peso de la inversión extranjera, privilegios distributivos, entre otros).

Estos elementos configuran la llamada insuficiencia dinámica del sistema, que junto con el modelo centro-periferia constituye el núcleo central de la teoría del subdesarrollo cepalina.

ESTRUCTURALISMO - LA TENDENCIA AL DETERIORO DE LOS TÉRMINOS DE INTERCAMBIO Y EL MODELO CENTRO-PERIFERIA (Segunda parte)

viernes, 27 de marzo de 2009

ESTRUCTURALISMO - LA TENDENCIA AL DETERIORO DE LOS TÉRMINOS DE INTERCAMBIO Y EL MODELO CENTRO-PERIFERIA (Segunda parte)

Prebisch desarrolla, a partir del deterioro de los términos de intercambio, e incorporando una visión sistémica, el modelo centro-periferia, caracterizando éste como el sistema de relaciones económicas internacionales basado en una constelación económica cuyo centro lo ocupaban los países industrializados y que organizaban el sistema en función de sus propios intereses. El centro está formado, pues, por economías fuertemente diversificadas, con un alto y generalizado progreso técnico y una gran homogeneidad en la productividad; la periferia se caracteriza por el atraso técnico, una muy reducida diversificación económica y una gran heterogeneidad de productividad interna, lo que presiona los salarios permanentemente a la baja por el exceso de mano de obra en los sectores de baja productividad y, a través de ellos, el deterioro de los términos de intercambio.

La diferencia de productividad y el deterioro de los términos de intercambio constituyen los elementos explicativos de las diferencias de ingreso real entre el centro y la periferia. En este sistema existe una tendencia, por tanto, al desarrollo desigual de ambos polos.

La política de desarrollo derivada de esta teoría, que se puso en práctica, pone el énfasis en la estrategia de la industrialización vía sustitución de importaciones (ISI) que debería acompañarse de políticas selectivas y moderadas de protección a las importaciones.

En estas primeras formulaciones de la teoría estructuralista se pone el énfasis, al igual que la teoría de la modernización, en la industrialización y en la planificación del desarrollo como elementos centrales.

ESTRUCTURALISMO - LA TENDENCIA AL DETERIORO DE LOS TÉRMINOS DE INTERCAMBIO Y EL MODELO CENTRO-PERIFERIA (Primera parte)

jueves, 26 de marzo de 2009

ESTRUCTURALISMO - LA TENDENCIA AL DETERIORO DE LOS TÉRMINOS DE INTERCAMBIO Y EL MODELO CENTRO-PERIFERIA (Primera parte)

El arranque de la teoría estructuralista puede situarse en la obra del primer director de la CEPAL (Raul Prebisch) y en la teoría del deterioro de los términos de intercambio (la tesis Prebisch- Singer), que pone la base del modelo centro-periferia, pilar central del estructuralismo latinoamericano que se desarrolla hasta mediados de los años sesenta. Es ésta la primera crítica importante a las teorías neoclásicas del comercio internacional, y a la teoría de las ventajas comparativas como elemento generador de igualdad económica.

La tesis del deterioro de los términos de intercambio, entendido como el deterioro de la relación entre el índice de precios de las exportaciones y el índice de precios de las importaciones, es planteada simultáneamente por Prebisch y por Hans Singer en 1949.

Singer explica el deterioro de los términos de intercambio, empíricamente comprobado en sus investigaciones realizadas sobre datos de países desde la década de 1870, a través de la influencia diferente del progreso técnico en los países desarrollados y en los subdesarrollados. Mientras en los primeros se aplica a la industria y este progreso se traduce en mayores rentas para los productores (no en disminución de precios) y una mayor demanda que realimenta el proceso, no ocurre lo mismo en los segundos. Debido a inelasticidad de la demanda de productos primarios y de alimentos, el progreso técnico se traduce en una disminución de precios de los productos primarios. Esto hace que disminuyan sus ingresos por exportaciones mientras aumentan sus gastos por importaciones.

Prebisch, por su parte, añade al efecto del progreso técnico la influencia importante de las causas internas de los países subdesarrollados (elementos estructurales). En el deterioro de los términos de intercambio aprecia una influencia importante de la organización y arreglos internos entre productores y consumidores que hace que los precios caigan en los países subdesarrollados, al contrario de lo que sucede en los países desarrollados, donde los acuerdos entre productores y consumidores permiten elevar tanto los precios como los salarios.

Aprecia asimismo la influencia de la distorsión de los precios internacionales de los productos primarios a través de los subsidios y contingentes (protección) de los países desarrollados, lo que provoca la caída de precios en los mercados internacionales de productos primarios.

LA TEORÍA ESTRUCTURALISTA DEL DESARROLLO (Segunda parte)

miércoles, 25 de marzo de 2009

LA TEORÍA ESTRUCTURALISTA DEL DESARROLLO (Segunda parte)

  • La maquinaria, tecnología y bienes de consumo manufacturados son importados de las economías avanzadas.
  • Mientras las estructuras económicas de estos países no se transformen, serán incapaces de alcanzar desarrollo económico.
  • Estas estructuras explican los desequilibrios macroeconómicos de los propios países sub-desarrollados.
  • Es fundamental una intervención decidida por parte de los gobiernos para promover la transformación estructural apoyada en el desarrollo de un sector industrial nacional diversificado.

Iniciada con la tesis del deterioro de los términos de intercambio y el modelo centro-periferia, con la estrategia de industrialización por sustitución de importaciones como estrategia más representativa, y tras la constatación de la existencia de obstáculos al desarrollo y de la influencia del dualismo a nivel internacional, la teoría estructuralista evoluciona hacia el enfoque más radical de la dependencia que se modera progresivamente (dentro del pensamiento estructuralista latinoamericano, no así en el

pensamiento neomarxista) con la incorporación de la interdependencia y el actual planteamiento neoestructuralista.

LA TEORÍA ESTRUCTURALISTA DEL DESARROLLO (Primera parte)

martes, 24 de marzo de 2009

LA TEORÍA ESTRUCTURALISTA DEL DESARROLLO (Primera parte)

La teoría estructuralista del desarrollo surge y se desarrolla alrededor del pensamiento de la CEPAL desde finales de los años cuarenta hasta nuestros días. Partiendo de un método de investigación (el estructuralismo) que toma un enfoque sistémico como método, supone una teoría que se desarrolla simultáneamente a la de la modernización y como alternativa a la misma.

Los elementos fundamentales de la Teoría estructuralista del desarrollo son, según Hunt los siguientes:

  • Distinción entre crecimiento y desarrollo económico, distinguiendo entre desarrollo y sub-desarrollo en función de factores estructurales y del progreso tecnológico. El subdesarrollo se caracteriza por la heterogeneidad enorme entre sectores avanzados tecnológicamente y muy productivos y gran cantidad de sectores atrasados con muy baja productividad.
  • La característica fundamental del desarrollo económico es la expansión del número de sectores que utilizan tecnología avanzada.
  • Si la expansión se produce en la producción a partir de sectores que no utilizan tecnología avanzada, se produce crecimiento pero no desarrollo.
  • Las estructuras económicas de los países subdesarrollados son fruto del proceso histórico de inserción en la economía internacional.
  • La función de los países subdesarrollados en la economía internacional ha sido la de provisión de recursos baratos para la industrialización de las economías más avanzadas y mercados para la exportación de las mismas.
  • De todo ello resultan estructuras económicas duales, un sector moderno orientado a la exportación de productos primarios y otro tradicional dedicado prácticamente a la subsistencia.

EL DEBATE ENTRE EL CRECIMIENTO EQUILIBRADO Y EL CRECIMIENTO DESEQUILIBRADO (Segunda parte)

viernes, 20 de marzo de 2009

EL DEBATE ENTRE EL CRECIMIENTO EQUILIBRADO Y EL CRECIMIENTO DESEQUILIBRADO (Segunda parte)

Otro planteamiento ligado al crecimiento desequilibrado es el de los polos de crecimiento (crecimiento geográficamente desequilibrado) que plantea Perroux, referido a un punto geográfico donde se inicia el crecimiento que creará en torno a sí un foco de crecimiento, entrando en una dinámica de generación de economías externas que configura un polo geográfico de desarrollo. Myrdal, por su parte, hace la observación de que este efecto de difusión puede contrarrestarse por un efecto rezago generado sobre el conjunto de la economía al descapitalizar otras regiones por atracción de los mejores recursos humanos (además de la atracción de empresas), efecto que puede incluso disminuir el nivel económico general que se tendría si no se hubiese alcanzado un polo de desarrollo.

La doctrina de Perroux supone una importante aportación de referencia para conceptos cronológicamente posteriores del desarrollo con base territorial (desarrollo endógeno y desarrollo local), donde el territorio juega un papel de especial importancia.

EL DEBATE ENTRE EL CRECIMIENTO EQUILIBRADO Y EL CRECIMIENTO DESEQUILIBRADO (Primera parte)

jueves, 19 de marzo de 2009

EL DEBATE ENTRE EL CRECIMIENTO EQUILIBRADO Y EL CRECIMIENTO DESEQUILIBRADO (Primera parte)

Durante los años cincuenta y sesenta se desarrolla una importante controversia en el debate ligado a las teorías de modernización alrededor de las características necesarias del crecimiento para generar desarrollo económico.

Paul Rodenstein-Rodan (1943) defiende la necesidad de una gran inversión en distintos sectores de la economía, de manera que estos se beneficien mutuamente de las economías externas generadas (crecimiento equilibrado), de una demanda amplia y diversificada que estimule la economía, de una gran inversión en infraestructuras y de mejorar la capacidad de ahorro. Propone, por tanto, un amplio plan de inversiones como mejor solución al problema del subdesarrollo, dirigido por un órgano central de planificación y financiado con capital extranjero.

En los postulados de Rodenstein-Rodan se realiza un fuerte énfasis en la planificación del desarrollo (acción deliberada de intervención pública) como elemento central, elemento característico de la teoría de la modernización.

Nurkse (1964) propone, en la misma línea, un gran volumen de inversiones extranjeras simultáneas en todos los sectores de la economía.

En la defensa de un crecimiento desequilibrado destaca fundamentalmente Albert Hirschman, quien afirma que el crecimiento ha de seguir una senda de desequilibrios. Esto es, “adelantos desiguales de un sector seguidos de los otros sectores que tratan de alcanzarlo” (Hirschman, 1970). La inversión, en este enfoque, se promueve a sí misma (el desarrollo de un sector arrastra a otros, por las economías externas generadas), por lo que resta importancia a la inversión y a la planificación.

La clave estriba en una inversión original no necesariamente muy grande que induce inversiones posteriores.

El planteamiento de Hirschman, aportando importantes novedades respecto a la posibilidad de aprovechamiento de elementos endógenos, dio lugar a procesos de crecimiento basados en la sustitución de importaciones que no dieron resultados satisfactorios para el desarrollo.

LOS MODELOS NEOCLÁSICOS DE CAMBIO ESTRUCTURAL

miércoles, 18 de marzo de 2009

LOS MODELOS NEOCLÁSICOS DE CAMBIO ESTRUCTURAL

Los modelos duales de W. Arthur Lewis tuvieron asimismo una gran relevancia, convirtiéndose durante los años sesenta en la “teoría general del desarrollo” de los países del tercer mundo, siendo su obra Teoría del desarrollo económico el manual por excelencia de la Economía del Desarrollo durante los años cincuenta y sesenta.

El modelo dual de Lewis describe la coexistencia de dos sectores claramente diferenciados en las economías en desarrollo: un sector tradicional (rural, superpoblado, con excedente de mano de obra, de subsistencia y de baja productividad) y el sector moderno (industrial, urbano y de alta productividad). El proceso de desarrollo se caracterizará por una transferencia de mano de obra desde el sector tradicional al moderno, hasta que el total del excedente de manos de obra rural sea absorbido por el industrial.

Esta concepción, que asimila ruralidad con atraso y lo urbano con lo moderno, tendrá especial significación en los modelos de desarrollo rural y urbano durante décadas, basado por tanto en la desruralización de la sociedad y de la economía como motor del desarrollo.

Hollis Chenery, por su parte, afirma que si bien la inversión y el ahorro son condiciones necesarias, no son suficientes si no se acompañan de transformaciones en las estructuras económicas, apuntando asimismo que las restricciones internacionales condicionan los distintos grados de desarrollo de los países, lo que supone una novedad en los enfoques vinculados a las teorías de la modernización.

LA DOCTRINA DE LOS CÍRCULOS VICIOSOS

martes, 17 de marzo de 2009

LA DOCTRINA DE LOS CÍRCULOS VICIOSOS

La doctrina de los círculos viciosos constituye otro de los grandes pilares de la teoría de la modernización. Como círculo vicioso se entiende “una situación en la que diversos factores están tan interconectados que en conjunto tienden a producir un estado de estancamiento del que resulta muy difícil salir”. En la Economía del Desarrollo se aplica este concepto principalmente al círculo vicioso de la pobreza, definido por Ragnar Nurkse como “una constelación circular de fuerzas que tienden a actuar y reaccionar una sobre otra de tal forma que mantienen al país pobre en un estado de pobreza. Un país es pobre porque es pobre”.

Según Nurkse los círculos viciosos afectan a la acumulación de capital por el lado de la demanda (escaso consumo y estímulo a la inversión) y por el lado de la oferta (escasa capacidad de ahorro y por tanto de inversión).

Gunnar Myrdal introduce el concepto del principio de causación circular acumulativa, donde pone de manifiesto de manera innovadora el carácter interdisciplinar del problema al introducir elementos del sistema social más allá del económico (producto y renta, condiciones de reproducción, niveles de vida, actitudes hacia la vida, instituciones y políticas). Este elemento introduce mayor complejidad al modelo de los círculos viciosos ampliando las relaciones causales circulares a elementos sociopolíticos y culturales, al mismo tiempo que puede ser considerada como una obra específica (y de gran importancia y repercusión) en la Economía del Desarrollo. El análisis de Myrdal pone de manifiesto las barreras estructurales internas al desarrollo y, si bien supera las simplificaciones de los modelos de Singer y Nurkse, no contempla la influencia de elementos externos a los países en el análisis.

LOS MODELOS DINÁMICOS POSTKEYNESIANOS

lunes, 16 de marzo de 2009

LOS MODELOS DINÁMICOS POSTKEYNESIANOS

Siguiendo el paradigma keynesiano se elaboraron, tras la segunda guerra mundial, una serie de modelos de carácter dinámico que tuvieron mucha repercusión en la Economía del Desarrollo y en concreto en las teorías de la modernización, destacando la síntesis de los modelos de Roy Harrod y Eversey Domar (conocido como modelo de Harrod-Domar) como el más formalizado.

El modelo no es desarrollado ni orientado al problema del subdesarrollo ni teniendo en cuenta especificidades de sus realidades, sino como un modelo general de crecimiento en condiciones de pleno empleo. Las conclusiones principales del modelo destacan nuevamente a la inversión como clave del proceso de crecimiento dada su capacidad de generar renta vía aumento de la demanda y del incremento que produce en la capacidad productiva de la economía. Puesto que el centro del desarrollo es el crecimiento y la industrialización, se requiere una planificación de las inversiones que rompan el círculo vicioso de la pobreza. Aparece de este modo una fuerte justificación teórica de las inversiones extranjeras, del endeudamiento externo y de la ayuda al desarrollo.

Nuevamente, y a pesar de su influencia en la Economía del Desarrollo, los modelos de Harrod- Domar no pueden ser considerados propiamente como tal puesto que ignoran la doctrina del caso especial y los criterios de Hirschman para la definición de la disciplina.

LA PERSPECTIVA HISTÓRICA DEL ATRASO ECONÓMICO DE GERSCHENKRON

domingo, 15 de marzo de 2009

LA PERSPECTIVA HISTÓRICA DEL ATRASO ECONÓMICO DE GERSCHENKRON

Alexandre Gerschenkron (1968), por su parte, aporta una explicación alternativa a la de Rostow. Este autor rechaza la importancia de la revolución industrial como modelo de desarrollo y resta importancia a la acumulación de capital, afirmando que el atraso económico relativo puede ser positivo por diferentes motivos (la tensión que genera la situación favorece la innovación institucional; el propio atraso favorece la producción de bienes de capital frente a los de consumo; permite combinar la imitación de los países desarrollados con elementos nativos). No obstante, coincide con Rostov en la importancia de la intervención estatal (de forma que compense la inadecuada oferta de capital, tecnología, etc.) y de la industrialización como claves del proceso de desarrollo.

La aportación de Gerschenkron reside en que no asume el modelo de desarrollo del mundo industrializado automáticamente como el modelo de desarrollo, incorporando la diferenciación en los análisis económicos según las diferentes realidades y pudiendo ser considerada como Economía del Desarrollo según el mencionado criterio de Hirschman (no así la teoría de Rostow).

LA TEORÍA DE LAS ETAPAS DE ROSTOW

sábado, 14 de marzo de 2009

LA TEORÍA DE LAS ETAPAS DE ROSTOW

La noción de desarrollo como proceso por etapas tiene una gran tradición en la economía del desarrollo. Walt Whitman Rostow, historiador norteamericano y uno de los principales pioneros del desarrollo, explica el proceso de desarrollo, en su obra Las etapas del crecimiento económico, como el tránsito desde la sociedad tradicional (etapa en la que se encontraban los países subdesarrollados) hasta la etapa de la calidad o más allá del consumo (en la que estaban entrando los países desarrollados en los sesenta).

Desde la sociedad tradicional (caracterizada por estructuras sociales jerárquicas y valores sociales tradicionales estables, renta destinada a la subsistencia y falta de conocimientos técnicos), los países acceden a la etapa de las condiciones previas al despegue (condiciones previas a la industrialización). En esta etapa se requieren cambios radicales en el aumento de infraestructuras, incremento de la productividad agrícola y expansión del comercio. Previa o simultáneamente se requieren transformaciones sociales como la aceptación de nuevas técnicas agrícolas, la intervención del Estado para la creación de infraestructuras o la existencia de políticas comerciales. En esta fase se da una gran influencia del efecto demostración de los países desarrollados o que han despegado.

La siguiente etapa es la del despegue, entendido como el “crecimiento rápido de un grupo limitado de sectores donde se aplican las modernas técnicas industriales”. Estos sectores son los denominados sectores guía (ferrocarriles, transformación de alimentos, naval, militar, etc.

Tras el despegue se inicia la marcha hacia la madurez, que Rostow define como “el período en que una sociedad ha aplicado eficazmente todas las posibilidades de la tecnología moderna al conjunto de sus recursos”. En esta etapa, no obstante, pueden darse desequilibrios sectoriales y regionales, y nuevos sectores guía desplazan a los anteriores (acero, electricidad, química, maquinaria, etc.). La marcha hacia la madurez se distingue asimismo por el cambio en la estructura de la fuerza de trabajo (desplazamiento desde el sector agrícola al industrial), el aumento de la renta, etc.

Tras la marcha hacia la madurez, los países pueden elegir entre mejorar la situación social con políticas de bienestar, aumentar el poder internacional de su economía o aumentar el consumo de masas, siendo esta última la que habitualmente es escogida por las sociedades. El consumo se generaliza y aparecen nuevos sectores guía (tales como el de automoción, vivienda, petróleo, electrodomésticos, etc.).

La etapa que apuntaba en su momento Rostow como la siguiente en las economías desarrolladas se caracterizaba por un aumento en el ocio y en las tasas de natalidad.

CARACTERÍSTICAS FUNDAMENTALES DE LA TEORÍA DE LA MODERNIZACIÓN

viernes, 13 de marzo de 2009

CARACTERÍSTICAS FUNDAMENTALES DE LA TEORÍA DE LA MODERNIZACIÓN

Las características fundamentales de la teoría se pueden resumir de la siguiente manera:

  • Identificación del desarrollo con el desarrollo económico y éste con el crecimiento medido a través de la renta per cápita
  • El subdesarrollo es un fenómeno de atraso relativo motivado por la existencia de los círculos viciosos.
  • Importancia de la industrialización.
  • El papel del Estado y de la planificación como elementos centrales del desarrollo.
  • El ahorro externo a través de ayuda, crédito o inversiones directas como activador del proceso de desarrollo a través de la inversión.

A partir del planteamiento del crecimiento por etapas, la teoría de la modernización se ve reforzada con la formalización de modelos dinámicos postkeynesianos. Las doctrinas de los círculos viciosos y los modelos neoclásicos de cambio estructural, que constituyen para algunos autores las primeras heterodoxias, así como el debate entre crecimiento equilibrado y desequilibrado, completan la descripción detallada de la teoría de la modernización.

LAS TEORÍAS DE LA MODERNIZACIÓN

jueves, 12 de marzo de 2009

LAS TEORÍAS DE LA MODERNIZACIÓN

Las teorías de la modernización constituyeron la ortodoxia económica en la Economía del Desarrollo desde su nacimiento tras la segunda guerra mundial hasta mediados los años 60, debido fundamentalmente a la preeminencia del paradigma keynesiano en la economía, al éxito del Plan Marshall en la posguerra y al clima político de la guerra fría. El nuevo pensamiento desarrollista que caracteriza las teorías de la modernización se convirtió en un elemento más del neoimperialismo americano en la búsqueda de alternativas a las revoluciones marxistas que se estaban produciendo durante la guerra fría.

El concepto de modernización puede entenderse como el “proceso por el cual se va progresivamente cerrando la brecha entre tradición y modernidad en sus acepciones más puramente weberianas. La reproducción paulatina de la situación alcanzada por los países o regiones elegidos como modelo de referencia. El concepto de difusión, entendido como la propagación del capital y tecnología desde los países más avanzados, considerado como “motor del proceso y un elemento imprescindible para salir del subdesarrollo”, se encuentra íntimamente ligado al anterior.

En la teoría de la modernización se entiende que el subdesarrollo es un problema de atraso económico debido a que los países subdesarrollados no pueden alcanzar el despegue, siendo las causas del atraso círculos viciosos que perpetúan los frenos al desarrollo. La manera de romper el círculo es mediante el ahorro y la inversión, y puesto que los países subdesarrollados no tienen capacidad de ahorro interno, se tiene que romper el círculo vía endeudamiento, ayuda internacional o inversiones extranjeras. Con esto se podría arrancar la industrialización que transforme la economía tradicional y agrícola en una moderna e industrial.

EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Octava parte)

miércoles, 11 de marzo de 2009

EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Octava parte)

También desde perspectivas sociológicas, algunos autores como José María Tortosa (Tortosa, 1999) realizan agrupaciones similares, considerando las teorías del desarrollo agrupadas en:

  • Teoría de la modernización;
  • Teoría de la dependencia;
  • Teoría de los sistemas-mundo;
  • Perspectiva neoliberal;
  • Desarrollo Humano.

Giovanni Reyes (2001), por su parte, considera, en un esquema similar, la globalización como una de las teorías (con bases teóricas en el movimiento social estructuralista-funcionalista), parecida a la teoría de los sistemas mundiales en la consideración de la escala mundial de análisis.

Por último destacar la interesante lectura del pensamiento sobre desarrollo aportada por Joan Prats (2001), similar a la crítica de Joseph Stiglitz a las concepciones anteriores sobre desarrollo. Arranca de los paradigmas o tradiciones intelectuales en las que se ha sustentado: por un lado el racionalismo constructivista, que ha sustentado prácticamente la totalidad del pensamiento sobre desarrollo (tanto el neoclásico, de la modernización y neoliberal, pero también el neomarxista y de la dependencia) y que dio lugar al diseño del sistema institucional de la cooperación internacional, y por otro lado, el racionalismo evolutivo o crítico, que emerge tras el redescubrimiento del valor de las instituciones para el desarrollo (abarcaría, por lo tanto, sólo enfoques alternativos del desarrollo como el desarrollo endógeno, autónomo, ecodesarrollo, los enfoques neoinstitucionalistas del capital social y, en cierta medida, el desarrollo humano).

EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Séptima parte)

martes, 10 de marzo de 2009

EL PENSAMIENTO ECONÓMICO SOBRE DESARROLLO (Séptima parte)

John McKay (1991) clasifica sin embargo los diferentes modelos de desarrollo que han sido dominantes en el pensamiento occidental en diferentes momentos en diez:

  • Teoría de la modernización;
  • Teoría de la dependencia;
  • Enfoque de las necesidades básicas;
  • Ajuste estructural;
  • Modelos de articulación;
  • Internacionalización del capital;
  • Antimodernización;
  • Desarrollo de las raíces populares básicas;
  • Ajuste con rostro humano; y
  • Desarrollo sostenible.

EL LLAMADO DESARROLLISMO DE LATINOAMÉRICA (Segunda parte)

martes, 3 de marzo de 2009

EL LLAMADO DESARROLLISMO DE LATINOAMÉRICA (Segunda parte)

Otro de los supuestos teóricos que subyace en la teoría desarrollista, es sobre los efectos del capital extranjero en el crecimiento del producto y en la balanza de pagos de las economías a las cuales se dirige. Con ello pretende superar a la teoría ortodoxa del comercio internacional, en cuanto, esta entiende los movimientos de capital sólo como factor tendiente a ajustar los eventuales desequilibrios de comercio entre países.

En función de esta conceptualización, la concepción desarrollista presenta un modelo en el cual el crecimiento depende directamente de la cuantía de la inversión y de la productividad marginal del capital.

El capital extranjero aparece así, (para esta concepción) como factor básicamente positivo al crear posibilidades de financiar el desarrollo económico mediante el aumento de la tasa de crecimiento. No obstante, habría que anotar que en este pensamiento, también está presente la idea de que el capital también puede llegar a convertirse en un elemento desequilibrador que puede limitar el esperado “desarrollo autónomo”. En este sentido señalan puntos esenciales que permitirían obviar las dificultades derivadas del capital extranjero.

EL LLAMADO DESARROLLISMO DE LATINOAMÉRICA (Primera parte)

lunes, 2 de marzo de 2009

EL LLAMADO DESARROLLISMO DE LATINOAMÉRICA (Primera parte)

En el ámbito de los países subdesarrollados, durante la década del 30´, aparece con fuerza el llamado desarrollismo, pensamiento que pretende explicar la perspectiva evolutiva de estos países, colocando la atención en América Latina. Este pensamiento se nutre de una parte del enfoque keynesiano sobre las relaciones económicas internacionales y sus efectos en el crecimiento económico, y de otra parte, de la teoría ortodoxa del comercio internacional.

Esta última teoría nace en los centros dominantes del mundo capitalista, y estudia el Sistema Mundial como si este fuera homogéneo en tiempo y lugar, sin tomar en consideración la diversidad de situaciones realmente existentes entre los distintos países que conforman ese sistema. Esta perspectiva teórica adquiere vigor, ante la crisis que muestra el comercio exterior latinoamericano (“desarrollo hacia fuera”), asumiendo un lugar central en el debate, el punto sobre el “desarrollo hacia adentro” y la “industrialización sustitutiva de importaciones”.

En este marco gana peso la representación institucional del desarrollismo ejemplificado en la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), esencialmente notable en los años cincuenta. Con ello se sustenta la concepción sobre el proceso de industrialización, basado en un modelo de “desarrollo hacia adentro” como el motor del desarrollo.

Por tanto, en esta visión el comercio exterior se convierte en una variable complementaria sin perder su carácter necesario.

Se reconoció así, la importancia de este como fuente de divisas y de acceso a una base tecnológica, que implica importar maquinarias y equipos desde los países desarrollados.

VISIÓN KEYNESIANA

domingo, 1 de marzo de 2009

VISIÓN KEYNESIANA

Un auge importante en estos estudios, lo ocupa John Maynard Keynes, siendo relevante su obra “Teoría general de la ocupación, el interés y el dinero” publicada en 1936. Este autor realizó su estudio a partir de la influencia de la crisis económica mundial de 1929, momentos en que el pensamiento convencional estaba sujeto a la polémica de dos corrientes, por un lado la escuela neoclásica representada por Walras, defendiendo la idea del equilibrio que podía alcanzar el sistema capitalista. De otra parte, con un perfil macroeconómico se asocian a la idea de que el ciclo económico, toma cuerpo en la investigación del papel estimulante de las inversiones, las innovaciones y el uso del capital.

La contribución de Keynes significó el retorno a los problemas macroeconómicos como clave principal de la economía. Los supuestos de Keynes destacan que en épocas de depresión y alto empleo en los países industrializados, el problema era emplear los factores de producción. Planteando que la demanda agregada y sus componentes (consumo e inversión) tenían una importancia estratégica.

Keynes parte del criterio, de que un incremento en el gasto, que a su vez, incrementase la demanda agregada, conduciría eventualmente a un incremento de la actividad económica, y a un descenso del desempleo. El interés de este autor es la estabilización a corto plazo.

ESCUELA NEOCLÁSICA

sábado, 28 de febrero de 2009

ESCUELA NEOCLÁSICA

En el caso de la escuela neoclásica, esta enfoca su atención hacia las relaciones estáticas y microeconómicas. Toman como preocupación fundamental, la forma en que el mercado podía asignar en forma óptima los recursos en la sociedad. Su variante más actualizada está en la política neoliberal.

Esta corriente de pensamiento concebía el comercio exterior como un “motor de crecimiento” automático. Estaban a favor del libre cambio, identificándose en este aspecto con Adam Smith. Su argumento central, esta basado en la teoría de los costos comparados, según la cual, un país puede elevar su nivel de consumo por encima de lo que hubiera sido posible en un estado de autarquía, especializándose en la producción y venta hacia el exterior, de mercancías que relativa o comparativamente tengan costos más bajos de producción. Otro de sus supuestos es que el desarrollo en una parte del mundo daría lugar al desarrollo de las demás partes, mediante el efecto de “difusión”.

Entre sus representantes más destacados están Eli Heckscher (1919) y Bertil Ohlin (1933), quienes explican porque un país puede producir mercancías más baratas que otros.